jueves, noviembre 01, 2007

El enigma de París, de Pablo de Santis, una novela de homenaje al clásico género detectivesco, a modo de pastiche, con su correspondientes intrigas y asesinatos, en el París de la Exposición Universal, con la torre Eiffel en obras aún. Pero también una historia de iniciación de un joven, que se encuentra con sus admirados Doce Detectives (y sus correspondientes asistentes o adláteres) y, por supuesto, un divertimento que evoca con nostalgia un mundo iluminado por faroles de gas, cuando la electricidad era una recién llegada.
Esta es una novela entretenidísima, bien escrita, eficaz, y me ha gustado especialmente. Claro que, tratándose de detectives, soy un público fácil.
Un fragmento:
Pensé que no hay en la vida mayor gloria que hacer del propio nombre un salvoconducto capaz de abrir puertas y comprar voluntades. Bajé al salón con la alegría que deben sentir los conspiradores ante cada secreto, ante cada símbolo que les señala que están fuera de las cosas triviales de la vida.

Algunas otras opiniones sobre el libro, por Liniers y una reseña debidamente hecha aquí, por ejemplo.

2 comentarios:

Leuma dijo...

No lo he leído, me lo apunto, el fragmento que pones me parece realmente bueno, con alusiones simbólicas e imágenes en tan breve espacio, un saludo

Anónimo dijo...

creo que es un libro de cierto éxito, y las críticas son bastante coincidentes en lo entretenido que es...
espero que le guste
saludos